Diego Fernando Tarapués Sandino
Grupo Editorial Ibáñez, Bogotá, 2019
Prólogo del Prof. Dr. Adolfo Murillo
El encargo de prologar un libro constituye a la vez un privilegio y un desafío. Un privilegio en cuanto quien lo hace conoce el escrito antes que el resto de la comunidad académica y adelanta comentarios respecto de un escrito que los demás no han tenido la posibilidad de revisar influyendo de alguna manera en el ánimo del lector a través de sus apreciaciones. Un desafío, porque el prologuista debe conocer y reconocer los límites de la misión encomendada, lo que en oportunidades resulta difícil para quienes, como el suscrito, hemos dedicado buena parte de nuestra vida a la docencia, a la investigación, al acompañamiento de procesos de investigación y a la lectura crítica de escritos académicos.